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La lista de lujos que Anuel le pagó a Yailin en nacimiento de Cattleya

Aunque es su ex, Anuel no olvida que es la mamá de su hija y le dio muchas comodidades tras el parto.

03 Abr 2023 16:03 Por: canalrcn.com
Lujos que Anuel pagó a Yailin en nacimiento de Cattleya | IG / @yailinlamasviralreal

El tema del momento es el nacimiento de la hija de la pareja de reggaetoneros conocidos como Anuel AA y Yailin la más viral. Para la dominicana, es su primera bebé y la dio a luz a sus 20 años, un sueño que, al parecer, tenía desde hace tiempo.

Aunque el amor de Anuel a Yailin ya se acabó, el que tiene por su hija es interminable

Anuel, de 30 años, ya era padre antes de Cattleya de hijos que sí acepta e hijos que no. La llegada a este mundo de la pequeña niña se dio en una sala de cirugía, pues tuvo que ser con cesárea programada y el puertorriqueño estuvo al lado de su ex en cada momento del parto. Al parecer, el boricua ha aprendido a dividir su relación, que ya terminó, con la más viral y el amor que le tiene a esta hija.

¿Cuáles fueron las comodidades que Anuel le pagó a Yailin el día de su parto?

Así pues, teniendo en cuenta que el ex de Karol G no dudo en darle, desde el principio, lo mejor a su hija Catlleya, se debe recordar que esto incluye las comodidades que debe tener la madre para cuidarla en sus primeros meses de vida. Aquí hay una lista de los lujos que le brindó a Yailin tras el parto.

  1. La increíble decoración rosada, llena de globos, peluches y rosas en la habitación de la dominicana en el hospital el día que dio a luz.
  2. En esta habitación también había una extensa variedad de dulces para todo el equipo de profesionales que atendían a la mamá de su hija, mismos dulces que también estaban disponibles para las personas que visitaban a la reggaetonera antes y después del parto.
  3. La posibilidad de que Yailin haya entrado al hospital a su estilista para que se viera maquillada en el momento de la llegada de la bebé a sus hijas. Para esto, Anuel tuvo que pagar la mejor habitación del hospital, en la que tuvieran privacidad, pero también la posibilidad de hacer prácticamente lo que se les ocurriera.