La Segura mostró la improvisada forma en la que viajó a Uruguay

Hace poco más de veinte días, la generadora de contenido, Natalia La Segura anunció que se iría del país por un tiempo largo y aunque no dio muchas explicaciones, más de uno aseguró que podría ser por salud, para mejorar su condición en la parte inferior de su cuerpo.  

Pero otros más bien consideraron que ella está pensando en abrirse horizontes internacionales y junto a su novio explorar mucho más y con más calma ese mercado. Lo cierto es que ella y su novio se fueron a los Estados Unidos y estuvieron generando contenido. 

Y aunque allá estuvo todo este tiempo, al parecer no era su destino definitivo, pues se dejó ver, junto a su novio, Ignacio Baladan tomando un vuelo muy especial, a Uruguay, país de origen de su novio y donde además están los negocios de él y su familia.  

La Segura perdió sus maletas de nuevo  

Es por eso que ambos se dejaron ver muy felices por todo lo que están viviendo. Pero antes de llegar a La Segura le ocurrieron varias situaciones que decidió documentar para sus miles de seguidores, pues una de ellas llamó mucho más la atención.  

Y es que La Segura, por un tema de salud, siempre le hace mejor estar acostada, aunque ella quiera estar de pie y siempre dando lo mejor de ella, es por eso que, en el avión, cuando vio que el asiento de su lado podría quedar vacío, se puso muy feliz, y así pasó, pues logró irse así todo el viaje, acostada y mucho más descansada.  

 

 

 

 

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Al llegar a su destino, La Segura debió contarles a sus seguidores que tuvo mucha suerte de que ese asiento que además era el único desocupado estuviera a su lado. Pero como no todo podía ser color de rosa, ella destacó que las maletas de vuelo fueron desocupadas, en su mayoría en la ciudad de Bogotá, y entre esas estaba la de ella.  

El nuevo destino de La Segura  

Esto dejó sorprendidos a sus miles de seguidores, quienes le comentaron, por qué siempre que viaja pierde sus maletas, bien sea por ella y algún despiste o por cuestiones de protocolo de los aviones que le dejan sus maletas.  

Ella entró en pánico, porque destacó que no tenía ropa, ni siquiera con qué desmaquillarse ni bañarse ni arreglarse, que lo único que tenía era lo que llevaba puesto y eso la tenía muy triste porque no quería estar así en el país de su novio.  

Y es que llegaron a Uruguay, país donde su novio nació y vive y es muy especial para ambos estar ahí. Pero ella no se sentía bien de cómo había llegado, sin embargo, dejó claro iba a ponerle toda la actitud y la buena energía pues su maleta debía llegar mañana.