Terapia para el alma: Cómo corregir a los niños
La psicóloga Paloma Carvajalino nos explica de qué forma disciplinar a los niños, sin recurrir a las agresiones.
Terapia para el alma: Cómo corregir a los niños
A medida que han cambiado los tiempos, disciplinar a un niño se ha convertido en una tarea titánica. Lo que antes parecía adecuado, a la hora de corregir a los pequeños, se ha quedado en el pasado, y las formas son diferentes.
La psicóloga Paloma Carvajalino nos explica que, muchas veces, se confunde disciplinar a un niño, con agredirlo. La diferencia es que disciplinar es enseñarles a los niños esa capacidad de saber cómo utilizar las habilidades, creencias, valores, principios y límites, para adaptarnos a la sociedad.
La mejor manera de disciplinar es entender por qué vamos a ejercer la disciplina, o a poner un límite. Qué buscamos en nuestros hijos poniendo ese límite.
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Es importante definir esto para adelantarnos a la explicación; los niños de hoy en día preguntan mucho el porqué de las cosas. Si, como padres, nos anticipamos a esa pregunta, es muy probable que el niño no entre a cuestionarnos.
La diferencia entre disciplina y ser agresivos es que la agresividad genera problemas emocionales, conductuales, físicos, cognitivos y sociales.
- Sea un ejemplo de la conducta que quiere ver. No podemos decirles que no nos griten, si nosotros lo hacemos
- Aplicar reglas que sean concretas, claras y coherentes. Los niños no entienden entre líneas
- Anticiparse y explicarle las posibles consecuencias lo que quieren hacer
- Escuchar activamente y permitirles expresar
- Busque asesoría profesional si es necesario
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