La rosa de Guadalupe | Capítulo 775| Mantener el honor
La oculta relación entre Arturo e Irene causarán que se cometan errores, por los cuales, ambos deberán pagar un alto precio.
Como hija de la secretaria del dueño de la empresa, Irene tiene la posibilidad de ver a Arturo constantemente, quien es el hijo del dueño y se ha vuelto de mucho interés para ella. Para su fortuna, Arturo también ha mostrado su interés, por lo que luego de miradas coquetas y salidas a escondidas, los dos comienzan una relación oculta de todos.
La familia de Arturo, sobretodo su madre, es una mujer que se fija en las apariencias y en las clases sociales, por lo que no quiere ver a su hijo con una chica que no haga parte de su clase social.
Ambos continúan con su relación a escondidas, pasando momentos más de cerca, incluso en las noches. Semanas después, las náuseas y los mareos prenden las alarmas de la madre de Irene, quien, luego de obligarla a hacerse una prueba de embarazo, se entera que su hija está embarazada.
A pesar de saber del hijo que espera Irene, Arturo no toma la valentía de contarle a sus padres, sobre todo por la presión de que su novia, con quien lleva varios años de relación, ha vuelto al país.
Sin querer darle paz, los padres de Irene se enteran quien es el otro implicado, por lo que enfrentan al padre de Arturo y a su familia, exigiéndole que se casen y respondan por el hijo que la joven espera. El corazón de la novia de Arturo se rompe, abandonándolo y dejándolo con rabia hacia Irene.
La madre de Arturo se niega a ser emparentada con la familia, y aunque intenta sobornar a la familia, finalmente acceden a casarse, algo que no hace nada feliz a la pareja. Arturo, quien ha generado un indescriptible repudio hacia Irene, es violentada por el joven.
Los padres de Irene denuncian a Arturo y lo hacen pagar por las acciones contra su hija, devolviéndola a su hogar y pidiéndole perdón por haberla obligado a casarse aun cuando no quería, entendiendo que no era el camino correcto.
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