Zumo para mejorar circulación: zanahoria, pepino, tomate, limón y remolacha

Tener una buena circulación sanguínea es importante, ya que por medio de los vasos sanguíneos llega oxígeno y nutrientes a las células del organismo. Cuando ocurren problemas relacionados al sistema circulatorio se pueden ocasionar enfermedades y dolencias no deseadas.

Para evitar estos inconvenientes, Iván Lalinde te trae este zumo que cuenta con vitamina A, C, potasio, calcio y nutrientes que benefician a las arterias y al corazón.

Ingredientes:

• ½ remolacha
• 1 limón
• 1 zanahoria
• 1 pepino
• 1 tomate

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Preparación:

1. Retírale la piel a la remolacha, al tomate y al pepino.
2. Extrae el jugo del limón y ralla la zanahoria.
3. Agrega los ingredientes a la licuadora junto con 4 cubos de hielo y un chorro de agua. Bate hasta integrar por completo.
4. No es necesario que cueles la bebida. Sirve y listo.

​Toma este zumo en ayunas durante una semana.

RECUERDA: puedes realizarlo en un extractor de jugos.

Propiedades:

Limón: contiene vitamina C en abundancia, eso hace que refuerce las defensas del cuerpo y se eviten enfermedades; además, alivia malestares como el catarro, la amigdalitis y pulmonías. El consumo de este fruto ayuda en casos de intoxicación gastrointestinal.

Pepino: es diurético, el cual es beneficioso para resolver problemas de infección urinaria. Mejora la digestión porque es una verdura que contiene bastante fibra. También combate dolores musculares, rehidrata y suaviza la piel, relaja los ojos cansados, regula la presión arterial y ayuda al crecimiento del cabello.

Remolacha: reduce los niveles de presión arterial, ya que es una buena fuente de nitratos. Baja las concentraciones de colesterol ‘malo’ y elimina la placa dental. Es buen alimento para las mujeres embarazadas, combate la osteoporosis y ayuda a controlar la diabetes; además, mejora el rendimiento sexual.

Tomate: es rico en antioxidantes naturales, vitamina A, K, hierro y potasio. Ayuda en la protección de enfermedades degenerativas y ceguera nocturna. Controla la coagulación de la sangre, ayuda a mejorar la circulación; además, contiene altos niveles en fibra, lo que beneficia al sistema digestivo.

Zanahoria: mejora la vista, es diurética, controla el colesterol y los triglicéridos y controla el estreñimiento. Esta hortaliza es rica en ácido fólico, calcio y vitamina C; además, aporta vitamina A. La zanahoria protege y regenera las membranas digestivas, lo que resulta adecuado para personas con gastritis, estreñimiento e indigestión.

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