Jaime le jugó una broma al padre Cuervo
Por su necesidad de hacerse sentir y no permitir que el director siguiera controlando a los estudiantes con su autoridad, Jaime planeó una broma para alzar su voz de protesta.
Reuniendo a sus compañeros, Garzón aplicó las leyes de la física que aprendió en clases para mover el carro del padre Cuervo hasta la capilla de y así demostrar que la unión hace la fuerza, pues al curso completo no lo pueden echar. Para Jaime, hacer cosas grandes es la mejor manera de hacerse escuchar y generar una diferencia.