Corazones Blindados | Capítulo 8 | Ávila y Ochoa realizan un operativo contra el hurto
El teniente Ávila habla con la subintendente de su relación fuera del trabajo.
Solipa vuelve a ser sometido por Gongo debido a que él piensa que es amigo de Ávila, aunque llega uno de sus cómplices y lo detiene explicando que la policía aún no sabe de ellos.
Entre tanto una llamada anónima alerta a la policía de un carro bomba que pondrán en la ciudad.
Solipa le confiesa a Gongo que pensó que él debía matar a Ávila, aunque Gongo lo negó rotundamente y dijo que él era quien iba a realizar esta acción.
Domínguez llega a desactivar el posible carro bomba que ha sido puesto en frente de la guarida de Gongo.