El Chavo del 8 | Capítulo 295 | Don Ramón pinta su puerta
Luego de pintar una silla de amarillo, don Ramón usa el mismo color para la puerta de su casa.
Don Ramón pinta una silla en el patio de la vecindad y doña Florinda le expresa su molestia porque teme que ocurra algún accidente. Kiko llega y le dice a su mamá que obtuvo muy buenos resultados en la escuela, la Chilindrina también le da buenas noticias a su padre.
Luego de recibir varios golpes de Kiko, el chavo lanza un ladrillo dirigido al hijo de doña Florinda, pero resulta lastimando al señor Barriga, quien llega a cobrarle la renta a don Ramón.
El papá de la Chilindrina pinta la puerta de su vivienda de un color muy vivo para el señor Barriga, pero finalmente logra convencerlo. El chavo incomoda a don Ramón en su labor, así que el hombre envía al niño de vuelta a su barril.
La Chilindrina le presume al chavo una paleta, que termina en el piso por la ira del niño. Don Ramón resulta pintando por error la cara de Kiko luego de ser interrumpido en los arreglos que le hace a su vivienda.
