Natalia Jérez confiesa lo difícil y emocionante que ha sido su embarazo

Una sensual fotografía frente al espejo fue la excusa perfecta para que Natalia Jerez, semidesnuda y mostrando su barriga, se refiriera emotivamente a su embarazo que ya entró en su etapa final.

“No me ha dado vómito ni mareo afortunadamente, aunque ya estoy durmiendo pésimo, acomodar el peso de la panza a lo largo de la noche, el dolor de espalda y la paradera al baño cada rato a hacer pipí, hacen que duerma casi la mitad de lo que dormía antes”, afirmó la actriz quien describe su proceso como mágico y difícil.

Además, reveló en la publicación que su bebé crece sano, pero que está asistiendo a terapias por una inflamación.

“He tenido un embarazo sin complicaciones hasta el momento, lo cual agradezco cada día, sin embargo, ya me dio una inflamación en el sacro y una fascitis plantar que me han mandado a fisioterapia y han hecho que tenga que reducir el ejercicio y mi hiperactividad”, aseguró Jérez.

Natalia declaró que está en su semana 26 de gestación y dijo que esta experiencia ha sido una montaña rusa de emociones con días muy felices y otros muy sensibles.

“Lo mejor ha sido sentir el cariño de las personas que me quieren y celebran como yo esta bendición, sentir a mi bebé moverse y por supuesto los sabores de la comida, es como si por primera vez estuviera probando todo, Yummi!”, expresó.

Al final de la publicación, la caleña reflexionó sobre la falta de conciencia de algunas personas en torno al “estado sagrado”, como ella misma ha llamado al embarazo, y a la falta de caridad hacia las mujeres en avanzado estado de gestación.

“Me ha llamado la atención que todavía existan lugares como almacenes sin fila prioritaria para embarazadas o personas que parqueen en la parte final del andén, donde existe una rampa para bajar el andén y cruzar la calle, me pone a pensar en qué nos están enseñando en los hogares, colegios y comunidades”, concluyó. 

26 semanas creándote y sin perderme un solo segundo de ti y de esta experiencia! Cada proceso es personal y respetable, sin embargo el mío ha sido muy real con lo mágico y lo difícil que este cambio conlleva. No me ha dado vómito ni mareo afortunadamente, aunque ya estoy durmiendo pésimo, acomodar el peso de la panza a lo largo de la noche, el dolor de espalda y la paradera al baño cada rato a hacer pipí, hacen que duerma casi la mitad de lo que dormía antes. He tenido un embarazo sin complicaciones hasta el momento, lo cual agradezco cada día, sin embargo ya me dio una inflamación en el sacro y una fascitis plantar que me han mandado a fisioterapia y han hecho que tenga que reducir el ejercicio y mi hiperactividad. Ahora estoy en el tercer trimestre de mi embarazo aquí y ahora viviendo cada cosa en su momento, con unos días muy felices y otros muy sensible, toda una montaña rusa de emociones. Lo mejor ha sido sentir el cariño de las personas que me quieren y celebran como yo esta bendición, sentir a mi bebé moverse y por supuesto los sabores de la comida, es como si por primera vez estuviera probando todo, Yummi! Me ha llamado la atención la falta de consciencia de algunas personas frente a este estado sagrado y en algunos lugares la falta de cultura ciudadana frente a las mujeres embarazadas; que todavía existan lugares como almacenes sin fila prioritaria para embarazadas o personas que parqueen en la parte final del anden, donde existe una rampa para bajar el anden y cruzar la calle, me pone a pensar en qué nos están enseñando en los hogares, colegios y comunidades.

Una publicación compartida por Natalia Jerez (@mijerez) el Ene 25, 2018 at 9:26 PST

19 semanas

Una publicación compartida por Natalia Jerez (@mijerez) el Dic 9, 2017 at 3:10 PST

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